Cuidado en Halloween con los disfraces comprados en Marketplace

De entre todas las tiendas habidas y por haber, ya sean físicas o virtuales, los marketplaces son las que tienen menos inspecciones y controles. Muchas veces hasta venden productos sin el marcado de la CE o sin indicar la edad para la que están recomendados.
Pero ¿qué es un marketplace? Es un concepto superior para vender online: es el hipermercado virtual en el que se pueden encontrar todas las opciones que necesita un cliente. En una misma plataforma, distintas marcas ofrecen sus productos para que todo esté a un simple clic.
La crisis y la inflación obligan a muchas personas a financiar sus compras pagando a plazos si esta opción es posible en el marketplace escogido. Otra opción nada descartable para no tener que hacerlo es solicitar antes de la compra un préstamo rápido que luego de devuelve directamente a la financiera.
Halloween y el marketplace
Halloween es el caldo de cultivo perfecto para buscar disfraces en un marketplace. Cumple los requisitos que esta celebración se merece: compra rápida, apañada y económica, pero ¡cuidado! Muchas veces, los disfraces no cumplen la normativa, pese a que se alerta de ello a Consumo y a la Safety Gate (Red de Alerta Europea).
A la hora de comprar, hay que ser cuidadoso y comprobar que el disfraz cumple con el etiquetado de la Comunidad Europea. Los más pequeños deben evitar capuchas, cordones muy largos, embalajes muy finos o piezas extremadamente pequeñas por el riesgo de asfixia.
Análisis de 15 disfraces
La Organización de Consumidores y Usuarios ha analizado la seguridad y el etiquetado de 15 disfraces para Halloween, así como 5 tipos de pintura para la cara y el resultado no ha sido muy alentador. En marketplaces hay más riesgos que en las tiendas de la calle porque estas pasan más controles.

Seguridad mecánica y axfisia
Una de las razones es que una tienda física, el disfraz se abre, se comprueba y solo se compra si le convence al cliente. Además, claro está, las inspecciones en tiendas virtuales son mínimas comparadas con las que tienen que pasar los comercios tradicionales.
Los peligros detectados más comunes estaban relacionados con el riesgo de asfixia y la seguridad mecánica:
1. Empaquetados en bolsas de menos de 38 micras (demasiado finas). Pueden pegarse a la cara y duplican la posibilidad de asfixia si se metieran en la cabeza.
2. Piezas minúsculas que pueden romperse en pedazos. Para los más pequeños de 3 años, estas piezas están prohibidas y es igual de peligroso si el disfraz se ha heredado de un hermano.
3. Cordones o lazos menores de 7,5 cm para el cuello. En los menores de 7 años, además, están estrictamente prohibidos.
Riesgo de inflamabilidad y sustancias tóxicas
La posibilidad de que el disfraz se inflame es menos habitual, de hecho, solo se ha visto en 3 de los 15 disfraces examinados. El riesgo estaría en lo rápido que se propague una llama si la hubiera y en su persistencia. Conviene recordar siempre que un disfraz destinado a un menor de 14 años tiene la consideración de juguete.
Este 2022 se detectaron menos sustancias tóxicas que otros, así que excepto en un disfraz no hubo presencia de ftalatos, metales pesados o colorantes azoicos. Es de vital importancia mirar la etiqueta antes de efectuar una compra y, por supuesto, adecuarla a la edad de quien se pondrá el disfraz.
En los marketplaces online, los defectos en el etiquetado siguen siendo una causa de riesgos. Es recomendable descartar disfraces con capuchas muy cerradas y con caretas que impidan la respiración o estén mal ventiladas.
En el caso de querer llevar la cara cubierta, es mejor optar por un maquillaje de fácil lavado, ya que no se han detectado sustancias tóxicas en ellos. Bajo ningún caso hay que ponerse lentillas de fantasía a menos que se compren en una óptica y se lleven puestas poco tiempo.
El tique de compra, como para cualquier adquisición, debe guardarse por si procede después alguna reclamación. Para tranquilidad de los compradores, hay un acuerdo con la Comisión Europea que exige la retirada inmediata de los productos que no cumplan las expectativas.
A este convenio (Product Safety Pledge) están adheridos Amazon y AliExpress, entre otros espacios de marketplace. No obstante, desde la organización de consumidores y usuarios se pide encarecidamente que se incrementen los controles antes de la venta para evitar después llevarse las manos a la cabeza.