¿Sabes hacer un presupuesto personal?

19 nov 2024

Saber apañártelas con el dinero que entra y sale de tu cuenta corriente todos los meses es la clave para una economía personal o familiar saludable. Eso de que todo se resolvería si tuvieras más dinero no te lo creas, porque, si por mucho que entra más sale, el problema sigue ahí.

La clave está en encontrar el equilibrio financiero, así que en este post indicaremos cómo proceder para elaborar un presupuesto, punto de partida para controlar tu economía. Si ni con esas eres capaz de llegar a fin de mes o, simplemente, necesitas una ayuda extra, los créditos rápidos son tu solución.

Pasos para hacer un presupuesto

El presupuesto personal es esa herramienta que hará que te planifiques y organices tu economía hasta la perfección. Seguirlo es vital para tener éxito y, para ello, hay que tener el propósito de hacerlo. El objetivo del presupuesto es hacerte la vida más fácil dándote una perspectiva clara de tu situación.

Esta perspectiva es la que te permitirá tomar decisiones con conocimiento sobre cómo mover tu dinero. La eficiencia de su funcionamiento radica en el control de los gastos e ingresos. Evitar deudas superfluas siempre es buen consejo y ahorrar todo lo que se pueda también. Atento a los pasos para empezar la elaboración del tuyo.

Paso 1. Conocer el dinero entrante

Haz una lista y mete ahí todas tus fuentes de ingreso. Sueldo, ingresos esporádicos, beneficios obtenidos con ciertas inversiones… lo que sea que puedas tener. Cerciórate de calcular cuál es tu ingreso neto, es decir, la cantidad de la que dispones una vez quitas las retenciones y los impuestos.

Paso 2. Clasificación y registro de gastos

Los gastos se clasifican en tres categorías; identifícalas para conocerlas a fondo y saber ante cuál estás en cada momento. La primera son los gastos fijos, unos gastos cuya cantidad suele ser la misma con alguna pequeña diferencia mensual. Entre ellos están la hipoteca, el alquiler, la letra de un coche o cualquier otro préstamo.

Los segundos tipos de gasto en la clasificación son los gastos variables. Son igualmente necesarios, pero la cantidad varía en función de las circunstancias. Entre ellos se encuentran los suministros: gas agua, luz, teléfono… A diferencia de los fijos, su cuantía puede reducirse con ciertos hábitos de consumo.

Por último, están los gastos discrecionales, tal y como los ha nombrado el Plan de Educación Financiera, una iniciativa de la CNMV, El Ministerio de Economía y el Banco de España. Estos gastos son superfluos e incluyen el ocio, la comidas o cenas fuera de casa, las suscripciones o los caprichos. En caso de necesidad, pueden eliminarse.

Paso 3. Gastos a examen

Cuando hayas terminado con las dos primeras fases, queda cotejarlas y sacar conclusiones. Quizá ahí te des cuenta de que tus gastos superan a tus ingresos, lo que, sin duda, es una fatalidad para cualquier economía doméstica. Si ese es tu caso, un cambio de costumbres y reajustes será necesario.

Paso 4. Las metas importan

Si alguien dice que el objetivo final no importa, miente. Establecer metas concretas te facilitará un destino claro. Las metas pueden será a largo, corto o medio plazo. Ejemplo de ellas son los planes de jubilación, un viaje para el verano cuyo ahorro empieza en enero o la creación de un fondo de emergencia.

Paso 5. ¡A crear un presupuesto!

Con todo claro y estudiado, es momento de organizar tu presupuesto. Cada categoría de gasto detectada debe ir asociada a una cantidad fija. Es importante dejar espacio para el ahorro, pensar que los imprevistos están ahí y que los gastos nunca pueden sobrepasar a los ingresos.

Paso 6. Ajuste y revisión del plan

La flexibilidad y la adaptación al cambio son requisitos para mejorar las finanzas de cualquiera. Entra en tu cuenta corriente todas las semanas para que no se te pase nada por alto y así te aseguras de seguir cumpliendo con el plan establecido. Si tienes varias, debes revisarlas todas.

Es de esperar que todas estas pautas te faciliten empezar con tu propio presupuesto. Recuerda que la constancia y la voluntad son los mejores aliados para tener una economía equilibrada. Si ni por esas te da la vida para salvar tu situación financiera, siempre te quedarán los préstamos online.