Cuidado con los seguros de decesos
Morirse es caro. Más todavía lo es en algunas comunidades autónomas que en otras, como ya anunciamos en este blog en una entrada anterior. Por eso, en numerosas ocasiones la gente contrata un seguro de decesos por eso de no dejar en la ruina a los más allegados. La idea es buena, pero activa todas tus alertas en la búsqueda y lee con lupa antes de dar el paso.
La falta de dinero hace que esta búsqueda sea a veces desesperada, pero hay que tener mucho cuidado. Solo en 4 de las 50 pólizas de decesos que analizó la Organización de Consumidores y Usuarios resultó ser similar el importe a un entierro contratado con la funeraria sin intermediario alguno.
Esto significa que tu afán por no dejar en la ruina a tus familiares puede resultarte más caro si contratas un seguro que si vas ahorrando poco a poco para esta desagradable causa o contratas un seguro de vida. Si ya tienes tu seguro de decesos y la esperanza de vida no es muy alentadora, sigue con él.
Qué saber de los decesos
Tras un minucioso análisis de 50 seguros de decesos, una persona que contrata uno acaba pagando el triple por la póliza a lo largo de los años que por lo que le costaría un entierro básico. De hecho, solo encontraron 4 aseguradoras en las que compensaba contratar una póliza.
En la Comunidad de Madrid, los servicios funerarios básicos se sitúan en los 5.200 euros, lo que incluye: ataúd, tanatorio, flores, esquela, burocracia, coche fúnebre y cementerio. La incineración, por su parte, sale mucho más barata, así que si tienes claro que es la opción que te gustaría, el seguro de decesos compensa mucho menos.
Otras alternativas
Estos seguros pueden pagarse en una única prima anual o con primas periódicas que vas pagando poco a poco. En cuanto a la edad, para algunos seguros tienes que haber cumplido ya los 65 años y para otros no hay un mínimo de edad.
En lo que sí se ha visto que puede compensar, según la OCU, es en ciertas garantías extras como traslados interprovinciales o, si se da el caso, desde el extranjero. Para la burocracia también resulta útil, sobre todo porque evita el papeleo a los familiares en momentos en los que es lo último que te importa.
Las alternativas al seguro de decesos son una cuenta de ahorro en la que se hacen ingresos de pequeñas cantidades a convenir o un seguro de vida. Esta alternativa también supone dejar parte de tu capital para tus familiares y, además, cubre la invalidez en caso de que tuvieras.
No obstante, si ya tienes un seguro de decesos desde hace tiempo y la esperanza de vida no es larga, es muy probable que te interese mantenerlo. Si te decides por el cambio a una aseguradora más económica, entérate bien de que te aceptan conociendo los detalles de tu estado de salud y compara bien.
Aunque la popularidad de los seguros de decesos es muy acusada, ya que 3 de cada 4 entierros se cubren con uno de estos seguros, lo cierto es que no está claro que compensen tanto como la gente piensa, pese a que los contrate el 70% de la población en España.
Muchas veces, la razón de pagar un seguro de fallecimiento es evitar trámites, papeleo y decisiones incómodas a los familiares, pero, si esta es la que te mueve, has de saber que una funeraria hará lo mismo en el momento en que contrates sus servicios. Por desgracia, solo tendrás que preocuparte del duelo de la pérdida.