Comprar un coche cuesta un 35% más que hace 5 años
La compra de vehículos con motores de combustión ha subido un 35% durante los últimos 5 años. Las razones son de distinta índole, pero entre las que más afectan se encuentran la inflación, la falta de microchips y las penalizaciones por emisiones de CO2 por parte de la Unión Europea a los fabricantes.
Adquirir un coche a un buen precio supone para el cliente la búsqueda incansable de los modelos más económicos. Compararlos puede llevar hasta un ahorro del 20% sobre el precio final según indican en nota de prensa desde la Organización de Consumidores y Usuarios.
Pese a este encarecimiento, muchos no pueden posponer la compra de un coche con motor de combustión y no tienen otra opción de movilidad. Por eso, a veces se ven obligados a recurrir a los microcréditos para dar una señal o hacer frente a la primera letra.
Subida por encima de la inflación
Esta subida no tiene precedentes y está ya muy por encima de la inflación acumulada. El modelo más barato en el mercado español, el Dacia Sandero, costaba en 2017 unos 7.035 euros y en el año 2022 ha ascendido a 9.990 euros, es decir un 42% más que hace 5 años.
Tras un análisis de las 15 marcas de coches más importantes en España, se observó que tan solo 2 de ellas habían dejado los precios por debajo del índice de precios al consumo (IPC). Los coches en cuestión son el BMW X1 y el Mercedes GLC.
La recomendación se centra en la comparación de modelos y en la búsqueda dentro del stock existente. Con un trabajo previo de “investigación” el comprador se puede llegar un 20% sobre el precio final. Los coches híbridos o eléctricos son, a la larga más baratos, pero el desembolso inicial es superior y no todo el mundo puede permitírselo.
La industria del microchip a España
El aumento de precio en este tipo de coches ha sido más bajo. Un ejemplo de ello es el híbrido no enchufable Mazda 2 que cuesta ahora 18.220 euros, es decir, un 18% más que el modelo más económico de hace 5 años. En estos momentos, el coche híbrido enchufable que más compensa es el Renault Captur con un precio de 30.160 euros.
Este vehículo híbrido cuesta casi igual que el más barato de hace 5 años, mientras que el Dacia Spring, que vale 17.905 euros, es un 18% menos que el eléctrico más económico de 5 años atrás.
Desde la OCU pretenden que las autoridades impulsen el desarrollo de la industria nacional del microchip para asegurar la estabilidad de los precios. Además, así se podría garantizar el suministro de todos los componentes necesarios. También es necesario que aumente el número de electrolineras con carga rápida.
La huella ecológica
Un reciente estudio sobre movilidad y huella ecológica de la organización ya mencionada, indica que un 47% de los encuestados aseguraba utilizar su coche cada día para los desplazamientos superiores a los 3 kilómetros. El transporte público se reservaba para un 21% de los traslados y el 5% dijo moverse en coche eléctrico.
Tan solo un 21% de los preguntados decía trasladarse en transporte público mientras el 23% aseguraba usar la bicicleta como medio de movilidad sostenible si no iban caminando. Solo un 5% se desplazaba en un transporte eléctrico, ya sea patinete, bici, coche o moto.
Para largo recorrido, el uso del coche particular prevalece en un 58% de las ocasiones y solo se comparte con otras personas el 9% de las veces. Los ciudadanos escogen el autobús y el tren en un 20% de las veces y el avión, el 13%.
Desde un punto de vista ecológico, el avión debería ser siempre la última opción, ya que un solo pasajero emite tres veces más emisiones contaminantes que emitiría si recorriera la misma distancia en coche y 20 veces más si hubiera elegido el tren como medio de transporte.