Más del 50% de los españoles cree que la ZBE atiende a razones políticas

Los entornos urbanos se complican en cuanto a movilidad se refiere si se pretende acceder a ellos en coche. Las restricciones en materia de movilidad están haciendo que un 14% de conductores se planteé comprar un coche nuevo por necesidad, cuyos precios están por las nubes.
El 61% de los preguntados está en contra de la ZBE (zona de bajas emisiones) y piensa que las restricciones y penalizaciones de los coches privados no tienen en cuenta todos los condicionantes que los hace usarlos. Si al precio de los coches nuevos, se le añade el precio del combustible y el dilema de “eléctrico o no”, la cosa es todavía más difícil.
Cambiar de coche no es fácil para muchos ni recurriendo a los préstamos rápidos que tan bien vienen para resolver situaciones puntuales. El precio de los vehículos nuevos ha subido un 40% con respecto a los 5 últimos años y la segunda mano tampoco es que resulte muy alentadora.
La ZBE, un descontento generalizado
Desde el Observatorio del RACE (Real Automóvil Club de España), han querido conocer la opinión de los conductores españoles con respecto a cómo pueden afectarlos la ZBE en su vida. Esta normativa se aplica en todas aquellas ciudades con un número superior a los 50.000 habitantes.
Entre sus conclusiones destaca que un 31% de los preguntados asegura que evitará esas zonas todo lo que pueda. Por su parte, el 20% no tiene ni idea cómo procederá, ya que las alternativas a entrar con coche en zonas urbanas no les encaje en su día a día. El descontento para ellos es considerable.

A favor y en contra
Más de la mitad de los españoles (un 54%) considera que la creación de esta zona de bajas emisiones solo responde a cuestiones políticas. Tan solo un 35% piensa que sí se ha perfilado el plan pensando en el medio ambiente por encima de todo. El 11% tiene dudas al respecto o bien lo achacan a cuestiones distintas.
Independientemente de lo que haya motivado el plan, su rechazo es mayoritario con un 61% de los encuestados en contra. Solo un 31% está completamente a favor de proteger el casco urbano de las ciudades con las menores emisiones posibles, y un 9% duda tanto que no sabe qué responder.
Pocas alternativas de movilidad
Los participantes de este análisis dijeron que veían una excesiva falta de alternativas a su movilidad. Aunque el 31% diga que evitará la ZBE, el 19% sigue manteniendo que no encuentra solución acertada estudiando las alternativas. Como señal de alarma se indica que solo un 14% se plantea un cambio de coche para cumplir con la normativa.
En cuanto al tipo de actividad se refiere, el 42% verá comprometidos sus desplazamientos habituales (médicos, colegios…), el 40% lo hará en sus actividades de ocio, el 28% estará afectado a la hora de acudir al trabajo y un 15% tendrá dificultades para abordar desplazamientos en su horario laboral.
El transporte público de verá potenciado
La creación de esta zona afectará a más de la mitad de los habitantes sean o no trabajadores. Del 71% de personas que se desplazaba en coche, solo quedará un 46%, ya que el resto cambiará el vehículo propio por el transporte público, por hacer los trayectos andando o por la moto. Solo un 1%s se inclinará por la bici o patinete eléctrico.
Por otra parte, muchos son quienes tienen dudas sobre los desplazamientos durante las vacaciones. Un 27% suele escoger las grandes ciudades para desconectar, pero desconocen los daros sobre cómo acceder a las zonas céntricas. De hecho, el 20% de los preguntados dice que podría cambiar de destino por la ZBE.